lunes, 22 de agosto de 2016

Tokio 2020 buscará el relevo generacional

El deporte español, que despide su era más dorada, vive un complejo cambio de ciclo, representado en el espectáculo de masas del fútbol, pero evidente en todo el olimpismo. Río 2016 salió bien, en gran parte, gracias a los veteranos: Beitia, Coloma, Chourraut, Craviotto, Valentín, Nadal, Belmonte y la selección masculina de baloncesto con los Juniors de Oro, con Pau Gasol, Navarro y Reyes. Los nuevos valores son escasos: los medallistas Carolina Marín, Marcus Cooper Walz y Eva Calvo, más los prometedores Samu Carmona, Jesús Tortosa, Joan Lluís Pons y Bruno Hortelano y la consagrada Garbiñe Muguruza, que falló en Brasil.

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Pau Gasol, a sus 36 años, ofreció otro recital en el torneo olímpico: máximo anotador.
Foto: Diego G. Souto (Facebook COE).
Unos Juegos Olímpicos suponen la culminación del trabajo de cuatro años.

Desde ya, toca preparar Tokio 2020.

No hay tiempo que perder.

Un reto importante para un deporte español que ha entrado de lleno en un cambio de ciclo.

Los grandes campeones y protagonistas de la edad dorada del deporte español, presentes o no en Río 2016, como Pau Gasol, Rafa Nadal, Alberto Contador o Fernando Alonso, apuran la recta final de sus respectivas gloriosas carreras.

No hay que engañarse, relevo a su altura no existe.

¿Qué le espera al deporte español en un futuro próximo?

Tokio 2020 lo dirá.

Una hipotética respuesta, a día de hoy, pasa por los pies de la selección de fútbol, mascarón de proa de la edad de oro del deporte español tras encadenar Eurocopa 2008, Mundial 2010 y Eurocopa 2012.

Hay generaciones irrepetibles (en mucho tiempo). La del fútbol lo fue.

Desde la Eurocopa 2012, la selección ha bajado en rendimiento: primera ronda en el Mundial 2014 y octavos de final en la Eurocopa 2016.

No es que haya ahora malos jugadores, en absoluto, pero los años no perdonan y no siempre se puede contar con Xavi, Iniesta, Casillas, Villa, Puyol, Xabi Alonso… a pleno rendimiento. Y no siempre salen (no había pasado hasta su aparición) jugadores a su altura.

Nadal (30 años y dos Olimpiadas) debutó con 17 en la ATP y arrastra un calvario de lesiones
que ya le apartaron de unos Juegos: Londres 2012. Foto: Diego G. Souto (Facebook COE).
El deporte español ha vivido mucho en los últimos años de los grandes éxitos de las principales figuras del fútbol, del baloncesto, de Nadal, de Contador…

Un hermoso, aunque ficticio, envoltorio para el conjunto del deporte español.

El nivel medio, que marca cada cuatro años los Juegos Olímpicos, bajaba al deporte español, salvo en Barcelona’92, fuera del top-ten de grandes potencias.

Un buen nivel, un competitivo nivel, pero no el nivel supremo de las grandes figuras.

Los Juegos Olímpicos de Río 2016 se han salvado con una enorme dignidad, con diecisiete medallas (siete oros, cuatro platas y seis bronces), gracias, en gran parte, a los veteranos del equipo olímpico, a los partícipes, en mayor o menor grado, de la edad de oro del deporte español.

La veteranía de la saltadora Ruth Beitia (37 años) (cuatro Juegos) (finalista en Pekín, cuarta en Londres y oro en Río), el ciclista Carlos Coloma (34 años) (tres Juegos) (inesperado bronce en Río), la piragüista Maialen Chourraut (31 años) (tres Juegos) (bronce en Londres y oro en Río), el piragüista Saúl Craviotto (31 años) (tres Juegos) (oro en Pekín, plata en Londres y oro y bronce en Río), la haltera Lidia Valentín (31 años) (tres Juegos) (quinta en Pekín, cuarta en Londres, a la espera del oro por el dopaje de sus rivales, y bronce en Río), el tenista Rafa Nadal (30 años) (dos Juegos ya que se perdió Londres 2012 por una tendinitis rotuliana, casi crónica, en ambas rodillas) (oro individual en Pekín y oro en dobles en Río) e incluso la nadadora Mireia Belmonte (25 años) (tres Juegos) (dos platas en Londres y oro y bronce en Río).

Será muy difícil que varios de estos medallistas repitan en Tokio 2020. Un ciclo olímpico se hace muy largo, más aún en los deportes de seguimiento reducido en los medios de comunicación entre Juegos y Juegos.

Mireia Belmonte, doble medallista en Londres (dos platas) y Río (oro y bronce),
quiere estar en sus cuartos Juegos en Tokio 2020. Foto: Facebook COE.
El problema es que entre Beitia, Coloma, Chourraut, Valentín, Nadal y los doble medallistas Craviotto y Belmonte han sumado más de la mitad (nueve) de las preseas de equipo olímpico español en Río.

De momento, Mireia Belmonte es la única que ya tiene en mente Tokio 2020: “Ahora tengo claro que quiero seguir nadando otros cuatro años más para llegar hasta los Juegos de Tokio. Me gusta mucho la natación como para dejarla ya. Tengo 25 años y estoy en la flor de la vida”.

El ejemplo de los estadounidenses Phelps (31 años) (cinco oros y una plata y tras estar dos años fuera de la piscina) y Anthony Ervin (35 años) (dos oros en Río) inspira a los veteranos. Pero la natación es un deporte, tradicionalmente, que quema campeones a velocidad de vértigo.

En la final de los 200 metros mariposa de los Juegos de Río, la campeona olímpica Mireia Belmonte era ya la segunda más veterana, solo por detrás de la japonesa Natsumi Hoshi, bronce con 26 años. Belmonte llegará a Tokio con 29 años.

No se puede pedir más a la generación de oro del deporte español.

Los Juegos de Río 2016 han sido su último servicio.

La selección masculina de baloncesto representa el mejor ejemplo. La generación de los Juniors de Oro, campeones en 1999 en Lisboa, con Pau Gasol, Juan Carlos Navarro y Felipe Reyes como internacionales aún en activo, sin olvidar a Carlos Cabezas y los retirados Berni Rodríguez y Raúl López, ha protagonizado una historia única. Única:

-Tres medallas olímpicas: platas en Pekín (2008) y Londres (2012) y bronce en Río (2016).

-Un oro mundial en Japón (2006).

-Tres oros europeos (2009, 2011 y 2015), dos platas europeas (2003 y 2007) y un bronce europeo (2013).

Rudy Fernández, José Manuel Calderón, Felipe Reyes, Pau Gasol
y Juan Carlos Navarro muerden el bronce de Río. Foto: Diego G. Souto (Facebook COE).
Durante más de una década, Gasol, Navarro y compañía no se han cansado de ganar y subir al podio de los grandes torneos internacionales.

Tokio 2020 queda muy lejos para Pau Gasol (36 años), Juan Carlos Navarro (36), Felipe Reyes (36) y José Manuel Calderón (que cumplirá 35 dentro de un mes).

Y Pau Gasol es irrepetible. ¿Es imposible verle con 40 años en Tokio? No. La puerta no está cerrada, pero...

Gasol, tras el bronce de Río, ha anunciado, de momento, que seguirá jugando con la selección:

“No sé cómo voy a procesar todo esto. Me encanta jugar en la selección de mi país y siento algo especial. Es muy especial. Lo voy a hacer todo lo que pueda, aunque no voy a ser rígido con la selección. Hay mucho talento y me encanta estar en la cima de los torneos. Los años pasan y alguna vez tendré que dejarlo y, cuando llegue, ya lo haré. Es parte de mi trayectoria. No puedo pedir nada más. Toda esta carrera es un regalo y jugaré todo lo que pueda. Va a ser un honor. Lo estoy pasando bien”.

Pero tampoco sería una buena señal que Pau Gasol, por muy bueno e irrepetible que sea, liderara a la selección de baloncesto en Río, como lleva pasando durante los últimos quince años con sobreesfuerzos recientes como el Eurobasket 2015 (con su histórica exhibición, con 40 puntos, ante Francia en semifinales) y los Juegos Olímpicos 2016 (máximo anotador, con 19,5 puntos por encuentro, por delante de Kevin Durant).

Al baloncesto le pasa como al fútbol. Cuesta cerrar una historia tan bonita.

Pero el deporte español, si aspira a mantenerse en la élite en Tokio 2020, necesita pasar página y abrir nuevos caminos.

Necesita nuevos valores. Río 2016 solo ha ‘descubierto’ a tres: el piragüista Marcus Cooper Walz (cumplirá 22 años en octubre), la número uno del mundo del circuito femenino de bádminton, Carolina Marín (23 años), y la taekwondista Eva Calvo (25 años). Cooper y Marín ganaron el oro. Calvo, la plata. Ese es el futuro.

A medio camino se quedan el piragüista Cristian Toro (24 años), el atleta hispano-cubano Orlando Ortega, plata en Río con 25 años, el taekwondista Joel Gonzalez, oro en Londres y bronce en Río con 27 años, y la selección femenina de baloncesto.

Laia Palau (catorce años como internacional) anunció ante de los Juegos que dejaría
la selección si ganaba una medalla en Río. Foto: Diego G. Souto (Facebook COE).
El equipo de Lucas Mondelo, que con la plata olímpica ha completado un ciclo soberbio con oro y bronce europeo y plata mundial, mezcla veteranía, con Laia Palau (36 años), Pascua (33) y la ausente Sancho Lyttle (33); madurez, con Silvia Domínguez (29), Anna Cruz (29), Laura Nicholls (27), Alba Torrens (cumplirá 27 a finales de mes) e incluso Marta Xargay (25), Leo Rodríguez (24) y Laura Gil (24); y juventud, con Astou Ndour (22), Leticia Romero (21) y Laura Quevedo (20). Y con el relevo garantizado. La selección sub-20 ha sido campeona en cinco de las seis últimas ediciones.

Los Juegos Olímpicos de Londres 2012 resultaron más prolíficos a la hora de encontrar nuevos medallistas. De los diecisiete medallistas en Londres, solo los piragüistas David Cal y Saúl Craviotto, la selección masculina de baloncesto y la nadadora de sincronizada Andrea Fuentes conocían el podio olímpico. Los viejos rockeros se han mantenido en Río.

Incluso entre los diplomas olímpicos cuesta encontrar nuevas figuras: las remeras Ana Boada (23 años) y Aina Cid (21), el boxeador Samu Carmona (20), el nadador Joan Lluís Pons (19), el taekwondista Jesús Tortosa (18) y la ya consagrada tenista Garbiñe Muguruza (22), vigente campeona de Roland Garros y finalista en Wimbledon 2015. Sin diploma (se quedó en las semifinales de los 200 metros lisos), pero con un futuro prometedor destaca también Bruno Hortelano (24 años).

El deporte olímpico español se ha hecho mayor.

Necesita rejuvenecer para Tokio 2020.

Y el trabajo empieza ya.

El éxito de Río no puede (ni debe) ocultar el complicado futuro del deporte español, a medio y largo plazo:

“La crisis económica da menos dinero al deporte y ha incidido mucho. En deporte de alta competición ha sido muy importante la ayuda recibida externamente, sobre todo con el dinero de la familia de los deportistas, y destacar el Programa Podium (patrocinado por Telefónica), que ha conseguido traer a 22 deportistas de los 88 becados que tenemos. Pero sí debo de añadir que hay que corregir el tema de las categorías inferiores, se debe invertir en deporte base”, ha recordado Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE). 

Los últimos datos del Ministerio de Educación y de Deporte fijan en 3,3 millones el volumen de licencias deportivas en España. El fútbol se lleva casi un tercio. 

España necesita trabajar desde la base, con una mejor y más plural educación deportiva.

Pero el deporte de alto nivel y el deporte olímpico, en concreto, tienen ante sí retos inminentes: 

“Es necesario un cambio de modelo. Si no, tendremos que acostumbrarnos a tener años buenos y años malos. En mi opinión, hemos de pasar a una gestión público-privada del deporte”, ha reclamado Blanco en una entrevista en El Mundo tras los Juegos de Río.

Pero quiero advertir de una cosa: no pido ese cambio solo para crecer, sino para no decrecer. Llevo años en los que aviso de que el deporte español puede perder posiciones si no actuamos. O invertimos, o perdemos campeones. Es más, dije que los efectos de la reducción de aportación económica del Gobierno se notarían en Tokio, porque en Río todavía hemos conservado a deportistas en su madurez, como la propia Ruth Beitia o Saúl Craviotto, que se beneficiaron de las etapas anteriores a los recortes en su preparación. El problema es para quienes tienen que hacerlo ahora”.

El Consejo Superior de Deportes (que no mantiene una relación fluida con el COE) cuenta con un presupuesto de 164,3 millones de euros en este año, una subida del 9,4% en año olímpico. 

Pero los fondos de las imprescindibles becas del Plan ADO están en palpable regresión: 52 millones en el ciclo olímpico de Pekín 2008, 42 millones en el ciclo olímpico de Londres 2012 y 31 millones en el ciclo olímpico de Río 2016.

Alejandro Blanco felicita a Lidia Valentín por su bronce en los Juegos de Río.
Foto: www.coe.es
De los 306 olímpicos españoles en Río, 178 no han disfrutado de ninguna beca. Ni mucho menos, todos son de élite. (Plan ADO). El programa ADO es el pilar de los éxitos del deporte español. Tiene que continuar. Sería un gravísimo error acabarlo o sustituirlo por otros paralelos. Debe mantener la esencia. La base no se debe mover”, ha exigido el presidente del COE.

Con un Plan ADO desinflado, en el ciclo olímpico de Río 2016 ya se ha abierto una nueva vía, impulsada por las becas de la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM). En Río, 55 olímpicos españoles disfrutaron de una beca de la UCAM, entre ellos nueve medallistas: Mireia Belmonte, Saúl Craviotto, Carolina Marín, Maialen Chourraut, Ruth Beitia, Eva Calvo, Artemi Gavezou, Lydia Valentín y Joel González.

Para que los éxitos de hoy sean también del mañana toca actuar. 

“Esté quien esté en el equipo directivo del CSD, creemos que hay que pensar en una revisión del Plan ADO, continuar con el apoyo al deporte femenino y profundizar en la alianza con el fútbol profesional para que llegue dinero a los deportes minoritarios. Es justo reconocer que al modelo del deporte español se le saca un rendimiento incomparable. Funciona a pesar de estar cuestionado”, ha subrayado el presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal.

Blanco apela a la imagen pública de las grandes figuras para que el deporte español no se detenga: “España goza de grandes deportistas que son un icono mundial en deportes que la sociedad acepta, respeta, quiere y aplaude. Los deportistas olímpicos se dan cuenta de la repercusión que tienen cuando vienen a unos Juegos y eso, hay que aprovecharlo. Son los embajadores de nuestro país”.

Será a partir de ahora cuando las menores inversiones de los últimos años y el trabajo de las federaciones deban encarrilar el futuro del deporte español, cuando ya no estén las grandes figuras en activo, como sí ha pasado en Río. Y será cuando, verdaderamente, el deporte español se la juegue. 

Cuatro años hasta Tokio. Ese es el plazo.





MEDALLERO ESPAÑOL JUEGOS RÍO 2016:

Fotomontaje con todos los medallistas en Río. Imagen: Facebook COE.
OROS (7): Mireia Belmonte (Natación) (200 metros mariposa femeninos), Maialen Chourraut (Piragüismo en aguas bravas) (Slalom K-1) (Prueba femenina), Rafa Nadal y Marc López (Tenis) (Dobles masculinos), Marcus Cooper Walz (Piragüismo) (K-1 1.000 metros) (Prueba masculina), Saúl Craviotto y Cristian Toro (Piragüismo) (K-2 200 metros) (Prueba masculina), Carolina Marín (Bádminton) (Torneo femenino) y Ruth Beitia (Atletismo) (Salto de altura femenino).

PLATAS (4): Orlando Ortega (Atletismo) (110 metros vallas masculinos), Eva Calvo (Taekwondo) (Peso ligero -57 kilos) (Torneo femenino), Leticia Romero, Laura Nicholls, Silvia Domínguez, Alba Torrens, Laia Palau, Marta Xargay, Leonor Rodríguez, Lucila Pascua, Anna Cruz, Laura Quevedo, Laura Gil y Astou Ndour (Seleccionador: Lucas Mondelo) (Baloncesto) (Torneo femenino) y Sandra Aguilar, Artemi Gavezou, Elena López, Lourdes Mohedano y Alejandra Quereda (Gimnasia rítmica) (Conjuntos).

BRONCES (6): Mireia Belmonte (Natación) (400 metros estilos femeninos), Lidia Valentín (Halterofilia) (Hasta 75 kilos) (Torneo femenino), Joel González (Taekwondo) (Peso ligero -68 kilos) (Torneo masculino), Saúl Craviotto (Piragüismo) (K-1 200 metros) (Prueba masculina), Pau Gasol, Rudy Fernández, Sergio Rodríguez, Juan Carlos Navarro, José Manuel Calderón, Felipe Reyes, Víctor Claver, Willy Hernangómez, Álex Abrines, Sergio Llull, Nikola Mirotic y Ricky Rubio (Seleccionador: Sergio Scariolo) (Balocesto) (Torneo masculino) y Carlos Coloma (Ciclismo de montaña) (Prueba masculina).

Total: 17.


DIPLOMAS EQUIPO ESPAÑOL JUEGOS RÍO 2016:

Cuartos puestos (6): Fátima Gálvez (Tiro) (Foso) (Prueba femenina), Jonathan Castroviejo (Ciclismo) (Contrarreloj masculina), Mireia Belmonte (Natación) (800 metros libres femeninos), Rafa Nadal (Tenis) (Individuales masculinos), Sete Benavides (Piragüismo) (C-1 200 metros) y Tamara Echegoyen y Berta Betanzos (Vela) Clase 49erFX femenino).

Quintos puestos (14): Joaquim ‘Purito’ Rodríguez (Ciclismo) (Carrera de ruta masculina), David Ferrer y Roberto Bautista Agut (Tenis) (Dobles masculinos), Samuel Carmona (Boxeo) (Peso minimosca -49 kilos), María Bernabéu (Judo) (Peso medio -70 kilos) (Torneo femenino), Garbiñe Muguruza y Carla Suárez (Tenis) (Dobles femeninos), Roberto Bautista Agut (Tenis) (Individuales masculinos), Quico Cortés, Miquel Delás, Andrés Mir, Bosco Pérez-Pla, Josep Romeu, Sergi Enrique, Marc Sallés, David Alegre, Manel Terraza, Vicenç Ruiz, Salva Piera, Álvaro Iglesias, Xavi Lleonart, Pau Quemada, Roc Oliva y Álex Casasayas (Reservas: Jordi Carrera y Mario Fernández) (Seleccionador: Fred Soyez) (Hockey hierba) (Torneo masculino), Rafael Cabrera-Bello (Golf) (Torneo masculino), Marina Alabau (Vela) (Clase RS:X femenino), Severo Jurado (con Lorenzo) (Hípica) (Doma clásica individual), Gemma Mengual y Ona Carbonell (Natación sincronizada) (Dúos), Jesús Tortosa (Taekwondo) Peso mosca -58 kilos) (Torneo masculino), Laura Ester, Marta Bach, Anni Espar, Beatriz Ortiz, Mati Ortiz, Paula Leitón, Clara Espar, Pili Peña, Judith Forca, Roser Tarragó, Maica García, Laura López, y Patricia Herrera (Seleccionador: Miki Oca) (Waterpolo) (Torneo femenino) y Javier Hernanz, Rodrigo Germade, Óscar Carrera e Íñigo Peña (Piragüismo) K-4 1.000 metros) (Prueba masculina).

Anna Boada y Aina Cid, sextas remo. Foto: Nacho Casares (Facebook COE).
Sextos puestos (4): Sonia Franquet (Tiro) (Pistola de aire 10 metros) (Prueba femenina), Anna Boada y Aina Cid (Remo) (M2- / Dos sin timonel) (Prueba femenina), Teresa Portela (Piragüismo) (K-1 200 metros) (Prueba femenina) y Silvia Navarro, Darly Zoqbi, Marta López, Carmen Martín, Nely Carla Alberto, Marta Mangué, Macarena Aguilar, Eli Chávez, Eli Pinedo, Nerea Pena, Lara González, Patricia Elorza, Naiara Egozkue, Ainhoa Hernández y Alexandrina Barbosa (Seleccionador: Jorge Dueñas) (Balonmano) (Torneo femenino).

Séptimos puestos (6): Berta García, Paula Medín, Ángela del Pan, Patricia García, Marina Bravo, Elísabet Martínez, Bárbara Pla, Amaia Erbina, María Casado, Vanesa Rial, Iera Etxebarría y María Ribera (Reservas: Irene Schiavon y Lourdes Alameda) (Seleccionador: José Antonio Barrio ‘Yunque’) (Rugby Siete) (Torneo femenino), Andrés Mata (Halterofilia) (Hasta 77 kilos) (Torneo masculino), Beatriz Ferrer-Salat (con Delgado), Claudio Alejandro Castilla (con Alcaide), José Daniel Martín (con Grandioso) y Severo Jurado (con Lorenzo) (Hípica) (Doma clásica por equipos),
Tania Calvo y Helena Casas (Ciclismo de pista) (Velocidad por equipos) (Prueba femenina), 

Iñaki Aguilar, Alberto Munárriz, Marc Roca, Ricard Alarcón, Guillermo Molina, Marc Minguell, Balazs Sziranyi, Albert Español, Roger Tahull, Fran Fernández, Blai Mallarach, Gonzalo Echenique y Dani López Pinedo (Seleccionador: Gabi Hernández) (Waterpolo) (Torneo masculino) y 
David Bustos (Atletismo) (1.500 metros lisos masculinos).

Octavos puestos (8): Joan Lluís Pons (Natación) (400 metros estilos masculinos), Ander Elosegi (Piragüismo) (Slalom C-1) (Prueba masculina), Ion Izagirre (Ciclismo) (Contrarreloj masculina), Sergio García (Golf) (Torneo masculino), María López de Eguilaz, Rocio Gutiérrez, Lola Riera, María López, Xantal Giné, Rocío Ybarra, Georgina Oliva, Carola Salvatella, Carlota Petchamé, Berta Bonastre, Beatriz Pérez, Begoña García, Gloria Comerma, Alicia Magaz, Lucía Jiménez y Cristina Guinea (Reservas: Júlia Pons y María Ángeles Ruiz) (Seleccionador: Adrian Lock) (Hockey hierba) (Torneo femenino), Mario Mola (Triatlón) Prueba masculina), Beatriz Pascual (Atletismo) (20 kilómetros marcha femeninos) y Carolina Rodríguez (Gimnasia rítmica) (Individual).

Total: 38.