jueves, 18 de mayo de 2017

La Décima pasa por Estambul

El Real Madrid de Pablo Laso y Sergio Llull, líder en la temporada regular de la nueva Euroliga, disputará su cuarta Final Four en los últimos cinco años, con un título y dos subcampeonatos. El regreso al trono europeo será caro, muy caro. En semifinales, espera el anfitrión Fenarbahçe de Obradovic. El otro cruce deparará un clásico de la competición: CSKA Moscú – Olympiacos.

Las estrellas de la Euroliga 2017


La Décima. Durante más de una década, entre 2002 y 2014, se convirtió en un desafío, una obsesión, una inspiración y un grito para el madridismo… en fútbol. El Real Madrid cumplió el objetivo en Lisboa, con máximo sufrimiento, tras derrotar al vecino Atlético en la prórroga tras salvarse de milagro con un gol en el último minuto de Sergio Ramos. El baloncesto no quiere ser menos. Tras romper hace apenas un par de años dos décadas de sequía europea, el Real Madrid de Laso y Llull buscará la Décima en la Final Four de Estambul.

Un proyecto ganador con una figura clave: Pablo Laso. El vitoriano ha recuperado el dominio de la sección de baloncesto del Real Madrid en España: tres Ligas ACB (2013, 2015 y 2016) y cinco Copas del Rey (2012, 2014, 2015, 2016 y 2017), con el añadido de tres Supercopas de España (2012, 2013 y 2014). Pero, aún más importante, Laso ha devuelto al Real Madrid al primer plano europeo. Tras conquistar el título en Zaragoza en 1995, con Sabonis, Arlauckas y Obradovic, los blancos habían casi desaparecido de la élite.

El Real Madrid ha vuelto a ser un grande del baloncesto europeo, acorde a su inigualable palmarés, con Laso en el banquillo: cuatro presencias en la Final Four (2013, 2014, 2015 y 2017), con un título (2015 ante el Olympiacos) y dos subcampeonatos (2013 ante el Olympiacos y 2014 ante el Maccabi). En Estambul, Laso y compañía lucharán por la Décima Copa de Europa ante el Fenerbahçe turco, anfitrión y rival en las semifinales; el CSKA Moscú ruso, vigente campeón europeo; y el Olympiacos griego, bicampeón continental en 2012 y 2013. Un cartel de lujo.

El camino a Estambul ha rozado la perfección. El Real Madrid ha estrenado el nuevo formato de la Euroliga, con una Liga regular de dieciséis equipos, mandando: primer clasificado con una fantástica marca de 23 victorias y 7 derrotas, apenas una, ante el Baskonia, en el WiZink Center, el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid. El equipo de Laso selló el pasaporte a la Final Four tras derrotar (3-1) en cuartos al rocoso Darüşşafaka de David Blatt. Los turcos se llevaron un partido a domicilio, pero el Real Madrid sentenció con dos victorias consecutivas en Estambul. Mejor presagio, imposible.

Laso, sin embargo, no siente que sean favoritos. Máxima ambición… y máxima cautela: “Estoy orgulloso del camino que hemos hecho, pero me encanta ganar y quiero ganar. El éxito no solo pasa por ganar o perder, pero entiendo que mucha gente piense que el ganador triunfa y los otros tres equipos fracasan. Para mí, no hay favoritos en la Final Four. No me considero favorito, pero tampoco inferior a nadie”. Y eso que el Real Madrid cuenta con el factor diferencial de Sergio Llull, el jugador más en forma en Europa en esta temporada.


Una locura: quinto máximo anotador de la Euroliga (16,3 puntos por partido), solo por detrás de Keith Langford (Unics Kazán) (21,7 puntos), Nando de Colo (CSKA Moscú) (19,4), Andrew Goudelock (Maccabi Tel Aviv) (17,2) y Brad Wanamaker (Darüşşafaka) (16,7). Unos números que el menorquín ha elevado en los playoffs ante el Darüşşafaka, con 18,5 puntos. Llull, por primera vez en su carrera, ha sido incluido en el Mejor Quinteto de la Euroliga, al lado de Nando de Colo (CSKA Moscú), Bogdan Bogdanovic (Fenerbahçe), Giorgos Printezis (Olympiacos) y Ekpe Udoh (Fenerbahçe).

Llull ha entrado en otra dimensión. A sus treinta años, tras el regreso de Sergio Rodríguez a la NBA, la decadencia de un mermado físicamente Rudy Fernández y la veteranía de Felipe Reyes, es la indiscutible referencia del Real Madrid, el ejecutor de los planes de Laso y el mago de los últimos segundos. Llull, que no deslumbró en la Euroliga 2015 que ganó el Real Madrid, ya ha avisado en Estambul de sus intenciones: “Si me llega el último balón el domingo para ganar la final, me lo tiraría. Si lo tengo que hacer, lo haré”. No va de farol. Lo ha demostrado sobradamente a lo largo de esta temporada.

Cuando el balón más quema, Llull se crece. Es su momento. Sin miedo, el menorquín hace posible lo imposible. Imparable. Llull se la jugó a los mismos Oklahoma City Thunder, en pretemporada, con tres triples sobre la bocina en tres de los cuatro cuartos. El último, para forzar la prórroga, marciano. No fue casualidad. Ya lo había hecho antes a lo largo de su carrera y lo ha repetido en esta misma temporada. Con siete puntos en el último minuto, incluida la canasta decisiva, tumbó al Bamberg en la Euroliga. Lo volvió a hacer ante el Barça, en el mismo Palau, en la ACB, con un tiro en el último segundo.

Con Llull en estado de gracia, el Real Madrid se jugará el pase a la final ante el Fenerbahçe de Zeljko Obradovic. Ya se vieron las caras en las semifinales de la Final Four 2015. Entonces, el Real Madrid ofreció un festival ofensivo (96-87), con un segundo cuarto demoledor (35-14). Ayón (dieciocho puntos) dominó la zona y los tiradores (todos) bombardearon el aro turco: catorce triples con un 46,7% de acierto. Desde entonces, en siete enfrentamientos, el Fenerbahçe ha sumado cinco victorias, incluida la eliminatoria de cuartos de final de la pasada Euroliga, con una serie resuelta con contundencia (3-0).



En esta temporada, el Fenerbahçe ganó al Real Madrid por un punto en Estambul.
Los blancos vencieron a los turcos por cinco en Madrid. Fotos: www.euroleague.net
El Real Madrid ha estado, sin embargo, mejor ante los turcos en esta temporada: derrota por 78-77 en Estambul, con tiro errado por Llull para ganar, y victoria por 61-56 en Madrid. Dos precedentes, en todo caso, igualadísimos. Una señal de lo que se espera para las semifinales de la Final Four en las que el Fenerbahçe contará con una ayuda extra que puede ser un factor diferencial: el público. Si el Real Madrid jugó con esa baza a favor hace dos años, ahora será el turno de los turcos. El Sinan Erdem Dome será una olla a presión.

“Hubiera firmado cualquier rival. El ambiente da igual, es una final. En las finales no eliges con quien juegas, llegas y luego hay que intentar ganarlas”, ha replicado Laso para rebajar la importancia del factor cancha a favor del Fenerbahçe. Pero la condición de anfitrión es solo una dificultad más. El Fenerbahçe, por sí mismo, ya supone un durísimo obstáculo, por plantilla y por cuerpo técnico, con Zeljko Obradovic, el señor de la Euroliga con ocho títulos con cuatro equipos diferentes: Partizan (1992), Joventut (1994), Real Madrid (1995) y Panathinaikos (2000, 2002, 2007, 2009 y 2011).

Con el Fenerbahçe, Obradovic ya ha sido semifinalista (2015) y subcampeón (2016). Acarició el título ante el CSKA, al que llevó hasta la prórroga. Obradovic confía en que el grupo haya aprendido de los errores y esté listo para levantar la primera Euroliga en la historia del pujante y opulento baloncesto turco: “Lo más importante es que mis jugadores tienen la experiencia de los dos años anteriores. Al principio de temporada, todos decían que íbamos a estar en la Final Four, por lo que estamos felices de estar aquí. ¿Ahora? Todos tenemos las mismas posibilidades”. Tras un irregular comienzo de Euroliga, con una marca de 4-3, los turcos fulminaron al Panathinaikos, con ventaja de campo de los griegos, en los cuartos de final de los playoffs: 3-0.

Si el Real Madrid presume de proyecto Laso, el Fenerbahçe también tiene su proyecto exitoso con Obradovic. Con el serbio, de momento, ha conquistado dos Ligas (2014 y 2016) y una Copa (2015) y se ha plantado en la elite europea. Laso conoce muy bien el trabajo de Obradovic. El serbio dirigió al vitoriano, entre 1995 y 1997, en el Real Madrid. “He tenido la suerte de tener grandes entrenadores, de algunos aprendí qué hacer y de otros lo que no debo hacer. Zeljko fue un cambio, fue otra visión de baloncesto de altísimo nivel. Es una persona que transmite mucho. Sabe llegar muy bien al jugador en momentos importantes, algo que siempre he admirado de él”, ha subrayado Laso.


Talento balcánico para el Fenerbahçe y el Real Madrid, con el serbio Bogdan Bogdanovic
y el esloveno Luka Doncic, respectivamente. Fotos: www.euroleague.net
Y Obradovic tiene una excelente plantilla con jugadores como Bogdanovic (14,5 puntos por partido en la fase regular y 19,3 puntos de media en los playoffs ante el Panathinaikos); el máximo reboteador y taponador de la Euroliga, Udoh (12 puntos, 7,5 rebotes y 2,1 tapones), Dixon (11,5 puntos), Vesely (9,6) y Sloukas (9,5), con Datome, Kalinic, Antic y Nunnally como valiosas alternativas. Un equipo completísimo. Un rival peligrosísimo, más aún en Estambul, en el camino del Real Madrid hacia la Décima.

A lo largo de la Euroliga, el equipo de Laso, con casi diez triples por encuentro, se ha mostrado más ofensivo que el Fenerbahçe, con diez puntos más de media por partido: 86,1 puntos frente a 76,2 de los turcos. Y Laso cuenta con más armas que Llull. Listos están, especialmente, tres hombres: Randolph (10,5 puntos y 5,3 rebotes de media en la Euroliga 2016/17), Ayón (10 puntos y 5,2 rebotes) y la sensación Luka Doncic.

El base esloveno, el Niño Maravilla, es ya una grandísima realidad del baloncesto europeo con apenas dieciocho años. Ataca (8,1 puntos de media en la Euroliga), defiende (4,5 rebotes y casi un robo por partido) y distribuye (4,3 asistencias). Y sin llegar a veinte minutos. Doncic apunta muy alto en la Final Four de Estambul: “No estoy nervioso. Es un sueño hecho realidad, estoy muy contento de poder jugar esta Final Four. La anterior que vi es la de Madrid (en 2015), que ganamos tanto en júnior como los mayores, y fue una experiencia muy bonita. Ahora, que tengo la oportunidad de ganarla con los mayores, es un sueño”.

Si el Real Madrid supera el gran obstáculo que representa el Fenerbahçe, aún quedará otro no menos importante: Olympiacos o CSKA Moscú. Todo un clásico de la Euroliga gracias, sobre todo, a los griegos. Tres precedentes y tres victorias (inesperadas) del Olympiacos en una Final Four. Al CSKA nunca le ha valido el cartel de favorito. Fracasó en las semifinales de la Euroliga 2015, con derrota por diecisiete puntos (52-69), y en las semifinales de la Euroliga 2013, con triunfo heleno por dos puntos (70-68). Pero, sobre todo, perdió la final de la Euroliga 2012, con una increíble remontada del Olympiacos de diecinueve puntos que cerró Printezis con una canasta en el último segundo: 62-61. Una gesta inolvidable.

Como en las otras tres ocasiones, el CSKA, que barrió al Baskonia (3-0) en los cuartos de final, es el gran favorito. Los rusos, ocho años después, se proclamaron campeones de la Euroliga en la pasada edición. El CSKA, que ha disputado trece de las últimas catorce Final Four, se libró, de esta manera, de casi todos sus fantasmas tras conocer todo tipo de decepciones europeas. Queda el Olympiacos. El CSKA necesita pasar definitivamente página ante los griegos. Dimitrios Itoudis ha obviado, en cambio, el pasado: “Entiendo el factor psicológico por aquel precedente (la famosa final de 2012), pero esto va de baloncesto y de los grandes jugadores que tienen los dos equipos. Se reduce a eso”.


Spanoulis y Teodosic se enfrentarán en las semifinales de la Final Four.
Fotos: www.euroleague.net
“No tiene nada que ver con el pasado. Va solo de vivir el presente”, ha reiterado el técnico del CSKA Moscú, que persigue su octava Euroliga y colocarse a solo un título del Real Madrid. Itoudis, con el ataque más poderoso de la competición (87,3 puntos de media), conserva a todos los principales hombres de la Euroliga 2016, que no han bajado el nivel, con el francés Nando de Colo (19,4 puntos por partido) y el serbio Milos Teodosic (16,2) en plena forma. El serbio, además, se encuentra ante, probablemente, su último gran desafío en el baloncesto europeo. Teodosic saltará a la NBA en la próxima temporada.

El Olympiacos, con la segunda mejor defensa de la Euroliga, con 74,2 puntos por partido, apelará, de nuevo, a sus inconfundibles señas de identidad para descentrar al CSKA: “La clave es la estabilidad que dan los propietarios del club en medio de una grave crisis económica en Grecia. Esa estabilidad se transfiere al equipo. Además, este equipo tiene jugadores con carácter que saben cómo jugar partidos duros y responder cuando están contra la pared”, ha analizado el técnico del Olympiacos, Ioannis Sfairopoulos.

Ahí estarán, como siempre, Printezis (12,9 puntos de media) y Spanoulis (12,7). El base, triple campeón europeo con el Panathinaikos (2009) y el Olympiacos (2012 y 2013), ha llegado fino cuando más importa. Spanoulis, en los cuartos de final ante el Efes, eliminatoria que se fue hasta el quinto partido, promedió diecisiete puntos con grandes porcentajes en el tiro: 47,4% en canastas de dos y 44,7% en los triples. Otra vez héroe. Spanoulis clasificó al Olympiacos para la Final Four con 22 puntos en el quinto partido ante el Efes.

Entre genios se entienden y De Colo respeta, y mucho, al griego, que ya le ganó en 2015: “La temporada es muy larga, sabe que el equipo le necesita en los momentos importantes y sabe exactamente cuándo debe aparecer y dar un paso adelante. Esa es la razón por la que el Olympiacos llega tan a menudo a la Final Four, pero también tiene otros grandes jugadores y todos saben exactamente lo que deben hacer”. No es casual, según ha reconocido el mismo Spanoulis, “muy orgulloso por todos los logros de los últimos años. Todo el mundo sabe que no son fáciles y que exigen muchos sacrificios. Son cosas que nadie te regala, que te tienes que trabajar muy duro”.

La Décima Euroliga del Real Madrid exigirá un enorme esfuerzo en la idílica Estambul. Obradovic ya tiene preparado al Fenerbahçe para situar, por primera vez, al baloncesto europeo al frente de Europa. Y con el público a favor. La ambición del vigente campeón, el CSKA, no se ha agotado. Y el Olympiacos es capaz de todo. Pero Laso, Llull y también Doncic están dispuestos a recordar que el Real Madrid es el verdadero rey de Europa. Y vienen a por la Décima.

Horarios:

-Viernes (semifinales):

17:30 horas: CSKA Moscú-Olympiacos.

20:30 horas: Fenerbahçe-Real Madrid.

-Domingo:

17 horas: Tercer y cuarto puesto.

20 horas: Final.


Palmarés EUROLIGA:


2016: CSKA Moscú. 2015: REAL MADRID. 2014: Maccabi Electra Tel Aviv. 2013: Olympiacos. 2012: Olympiacos. 2011: Panathinaikos. 2010: REGAL FC BARCELONA. 2009: Panathinaikos. 2008: CSKA Moscú. 2007: Panathinaikos. 2006: CSKA Moscú. 2005: Maccabi Elite Tel Aviv. 2004: Maccabi Elite Tel Aviv. 2003: FC BARCELONA. 2002: Panathinaikos. 2001: Kinder Bolonia.

Palmarés COPA DE EUROPA:

Final Four:

2001: Maccabi Elite Tel Aviv. 2000: Panathinaikos. 1999: Zalgiris Kaunas. 1998: Kinder Bolonia. 1997: Olympiacos. 1996: Panathinaikos. 1995: REAL MADRID. 1994: 7UP JOVENTUT. 1993: Limoges. 1992: KK Partizan. 1991: Pop 84 Split. 1990: Jugoplastika Split. 1989: Jugoplastika Split. 1988: Tracer Milano.

Final a partido único:

1987: Tracer Milano. 1986: KK Cibona. 1985: KK Cibona. 1984: Banco di Roma Virtus. 1983: Ford Cantú. 1982: Squibb Cantú. 1981: Maccabi Elite Tel Aviv. 1980: REAL MADRID. 1979: KK Bosna. 1978: REAL MADRID. 1977: Maccabi Elite Tel Aviv. 1976: Mobilgirgi Varese. 1975: Ignis Varese. 1974: REAL MADRID. 1973: Ignis Varese. 1972: Ignis Varese. 1971: CSKA Moscú. 1970: Ignis Varese. 1969: CSKA Moscú. 1968: REAL MADRID. 1967: REAL MADRID. 1966: Simmenthal Milano. 1965: REAL MADRID. 1964: REAL MADRID. 1963: CSKA Moscú. 1962: Dinamo Tbilisi. 1961: CSKA Moscú. 1960: ASK Riga. 1959: ASK Riga. 1958: ASK Riga.

Palmarés (por equipos):


REAL MADRID: 9.

CSKA Moscú: 7.

Panathinaikos y Maccabi Tel Aviv: 6.

Pallacanestro Varese: 5.

ASK Riga, Olimpia Milano, KK Split y Olympiacos: 3.

Pallacanestro Cantú, KK Cibona, Virtus Bolonia y FC BARCELONA: 2.

Dinamo Tbilisi, KK Bosnia, Virtus Roma, KK Partizan, Limoges, JOVENTUT y Zalgiris Kaunas: 1.

Palmarés (por países):

Italia (13): Pallacanestro Varese (5), Olimpia Milano (3), Pallacanestro Cantú (2), Virtus Bolonia (2) y Virtus Roma (1).

ESPAÑA (12): Real Madrid (9), FC Barcelona (2) y Joventut (1).

Grecia (9): Panathinaikos (6) y Olympiacos (3).

Rusia (7): CSKA Moscú (7).

Israel (6): Maccabi Tel Aviv (6).

Croacia (5): KK Split (3) y KK Cibona (2).

Letonia (3): ASK Riga (3).

Georgia (1): Dinamo Tbilisi (1).

Bosnia Herzegovia (1): KK Bosna (1).

Serbia (1): KK Partizan (1).

Francia (1): Limoges (1).

Lituania (1): Zalgiris Kaunas (1).